
El ajuste
Estamos en el final del año, y en esta ocasión, aprovechamos para cerrar el ciclo de La Realidad desde Buenos Aires, la columna a cargo de Marcos Sierras. Para cerrar este 2021 hablamos sobre una de las cuestiones candentes en el futuro inmediato de nuestro país, el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional. En épocas de regalos, vale recordar que el mayor regalo de Mauricio Macri a la Argentina fue “traer el fondo nuevamente al país”. Situación que genera una crisis permanente. Para Sierras “no existe una verdadera posibilidad de acuerdo sin un ajuste. Los alcances del ajuste lo conocemos de sobra con nuestra historia con el Fondo. Hay achicamiento del estado, en áreas sensibles como educación, salud. Dicen que no va a ser un acuerdo de shock, como fue siempre. Un ajuste implica que cada tres meses el Fondo puede rever su posicionamiento con el acuerdo”.
El miedo al default
El futuro del país parece no importarles mucho a las autoridades. En este país no existen las políticas a largo plazo. La estructura del Estado argentino y por ende el moldeo de la sociedad no está en cuestión. El columnista dice: “No está en agenda si agro-negocios sí o no, si hay mega-minería o no hay mega-minería. El sistema en el cual se asienta nuestro país, en principio somos un país agro-exportador, desde esa matriz tenemos que hablar, con una pequeña industria. En un momento la industria fue más fuerte de lo que es hoy. La dictadura, la década de los noventa, la crisis del 2001 y esta pandemia han obstruido el sistema productivo en cuanto referido al valor agregado. El ingreso de dólares a nuestro país es desde los agro-negocios y la minería. Eso no está en discusión, eso no se discute si eso si eso no”.
La calesita
Sobre si el pagar o no pagar la deuda fue otras de las cuestiones dialogadas con Radio Panamericana. Al respecto Sierras dijo: “Las consecuencias de no pagarle al Fondo no las sabemos. De una manera u otra siempre hemos pagado. Esta es una deuda fraudulenta. Se otorgó ese crédito multimillonario a un gobierno, no al Estado argentino se lo dio a un gobierno para que gane las elecciones. Violando los propios estatutos del FMI. Si hay que pagar primero con auditorias. Haber a donde fue ese dinero, habría que ver si no hubo retornos a personalidades del Fondo para que se otorgara semejante cantidad de dinero. Pensemos que más de la mitad, el 61% del dinero que se le debe al Fondo es nuestro, el resto, el 39% se lo debe el resto del mundo (…) No hay interés ni en Estados Unidos ni en Europa de que la Argentina pase en algún momento a ser un país industrializado. Imaginate la cantidad de posibilidades, o por lo menos haber generado un piso de industrialización lo suficientemente fuerte a partir de ese crédito con el Fondo. Hoy la historia seria otra. Ese dinero entró, y se fue, se fugó. Fue una calesita”.

La alineación Argentina a los poderes concentrados
La deuda como siempre, si se paga traerá una serie de efectos, tanto como si no se pagara. Todo el peso y presión de la deuda caerá sobre la clase media y la trabajadora. No sobre los capitales concentrados. El fotoperiodista lo explica a su manera: “Al fugarse ese dinero que el Fondo debía haber controlado, porque tenía las herramientas para controlar, para auditar cada dólar prestado a la Argentina. Ha violado todos los estatutos y sus responsabilidades con sus acreedores, en este caso la Argentina. La deuda es impagable, salvo que paguemos un costo muy grande. Si o si va a haber ajuste (…) No va haber un tarifazo, pero va a haber entre un 13 y un 17% de aumento en las tarifas. A los tarifazos del macrismo a todo el país, las tarifas siguieron aumentando con Fernández. La concentración económica está en el 1% de la población (…) En CABA, un kilo de carne esta entre 900 y 1.000 pesos. El Estado tiene que ponerle un límite a los precios usureros de dos o tres empresas y que algunas son multinacionales y manejan los alimentos en la República Argentina”.
Sumisión al FMI
El contexto actual es diferente al pago de la deuda en la época de Néstor Kirchner. La soja era de las commodities mejor pagas en el mundo. Hubo muchos dólares que entraron a la Argentina en esos años. El pago de esa deuda comenzó unos años después de la crisis del 2001. Marcos Sierras analiza la historia y el presente actual y dice: “Estamos a días de cumplir veinte años del 19 y 20 de diciembre donde el pueblo salió a la calle y dijo basta. El 2001 no fue algo espontaneo de la ciudadanía. Había cuestiones genuinas y otras dirigidas y pergeñadas por el conurbano bonaerense, como el saqueo (…) Dentro del frente de todos sostiene que el acuerdo es bueno, son muy poquitos los que dicen no al FMI. Entre ellos un espacio que se formó hace poco, donde se encuentran Boudou, Alicia Castro y Mariotto que dicen no al acuerdo con el fondo. No se está enfrentando a los poderes concentrados en el país. Se le está dando un poder de concentración enorme”.