El Río Paraná registra la altura más baja desde 1945
Por Agustina Bortolon para El Resaltador
Se trata de la medición más baja en lo que va de este siglo y las perspectivas no son alentadoras. La bajante compromete al sistema de lagunas provincial y pone en riesgo el equilibrio del ecosistema.
Desde comienzos de esta semana, el Río Paraná superó su propio récord en la ciudad de Santa Fe. Según el registro de Prefectura Naval Argentina, en el puerto local el nivel es de -0,22 mts, la altura más baja en casi 80 años.
Desde el 1 de enero pasado el caudal de agua del Paraná perdió 58 centímetros, ya que en el día que dio inicio al año 2022, su nivel estaba en 36 centímetros.
Respecto a esto, lastimosamente, las proyecciones y perspectivas a futuro no son para nada alentadoras. En su último informe, el Instituto Nacional del Agua (INA), indicó que «prevalece una condición general de disminución de los caudales entrantes al tramo argentino del río Paraná» y adelantó que «los niveles fluviales continuarán en la franja de aguas bajas».
Esta problemática bajante, se hace más evidente sobre todo en la Laguna Setúbal, ubicada en Santa Fe capital. Allí el agua se encuentra tan por debajo de los niveles normales, que solo se conserva el canal de navegación. Este hecho pone en peligro la subsistencia de peces y tortugas, desregulando todo el ecosistema.
Bajo el objetivo de resguardar la fauna local, un grupo de ambientalistas santafesinos se dispusieron a rescatar a los animales acuáticos que quedaron atrapados en pequeños charcos de agua, con muy poca oxigenación.
En la misma línea, explicaron que en la región de la laguna se observa un incremento de algas, lo que podría acarrear el florecimiento de cianobacterias, que son riesgosas para la salud.