PANORAMA

Córdoba: Crece la violencia en el Complejo Esperanza

Semanas complicadas

Luego de la revuelta de ayer en el Complejo Esperanza y de hechos de violencia en las últimas semanas en Panorama entrevistamos a Irina Silberman, delegada de ATE en la SeNAF. El último episodio de violencia ocurrió ayer alrededor de las 19.30 durante un cambio de guardia, donde hubo un total de 6 heridos. Días atrás un guardia fue golpeado con un palo en la cabeza en una revuelta ocurrida en el Instituto “Nuevo Sol” del Complejo Esperanza. En esta última ocasión un grupo de jóvenes desarmaron un metegol y con las piezas amenazaron a los empleados. Iniciando la conversación, Silberman comentó: Resultaron heridos cuatro personas, cuatro trabajadores del GES, que es un grupo especial que es del Complejo, que está para atender estos momentos de crisis y revueltas, resultaron heridos cuatro, un guardia del Instituto Horizonte y un joven”.

Lo sucedido ayer

¿Qué fue lo que paso ayer? “Lo que tengo entendido es que estaban en un momento de ocio en el patio, y cuando le pidieron que ingresen a sus sectores que serían los llamados pabellones en la cárcel, pero en el Complejo le decimos sectores, no quisieron, trabaron las puertas del patio, quedaron solos en el patio. Desarmaron, desarmaron las mesas y amenazaban a los guardias con los elementos que sacaron de ahí. Por lo tanto se dio aviso al grupo GES, que te digo es este Grupo Especial para desarticular esta situación. Y en ese forcejeo han quedado golpeadas algunas personas”.

Los últimos días

Al no estar ahí, no puedo decirte que es lo que desencadenó, muchas veces se desencadenan. En el Instituto Nuevo Sol que fueron los hechos violentos del fin de semana largo, eran problemas entre sectores, entonces en el intento de ir a pelear o de tomar represalias con otro grupo de jóvenes resultaron heridos los guardias al intentar frenar esa situación. Lo del otro Instituto no lo sé porqué fue” agregó.

Los responsables

¿Quiénes son las autoridades responsables del “orden” en la SeNAF? “Primero la secretaria de la SeNAF que es Georgina Tavella (foto), que es la secretaria de la Secretaría de la Niñez y la Adolescencia. La subsecretaria de Penal Juvenil es una mujer que ha asumido hace relativamente poco en lugar de Antonio Franco, que se llama Teresita González, es la responsable como subsecretaria de Penal Juvenil de Complejo Esperanza. Después hay un jefe de seguridad que es el que sigue en el organigrama, que se llama Martín Ponce de León. Esas son las autoridades del Complejo Esperanza, la secretaria, la subsecretaria y el jefe de seguridad”.

No debería existir un espacio para niños presos, no deberían existir niños delincuentes”

El contexto social

Ha habido varias revueltas en los últimos días” manifestó la entrevistada. ¿Qué está pasando en el Complejo? La verdad que la única explicación que encuentro es que estamos en un contexto social particular, hay una crisis social económica con una escalada de violencia a nivel social, que bueno, que se ve reflejado en todas las instituciones, en la vida misma, pero en este contexto particular. Que es un contexto hostil, difícil, un contexto de encierro, donde los jóvenes que son todos en conflicto con la ley penal, están encerrados en un espacio, no por voluntad propia.Lo que genera conflictos internos, internos, individuales digamos, y conflictos a nivel grupal, por lo tanto es un espacio difícil de trabajar, sumado a que hay pocos recursos”.

Los planteos de los trabajadores

Nosotros desde ATE venimos denunciando hace más de una año, si hace mucho tiempo, la precarización laboral desde la que se sostiene toda la SeNAF, no solo el Complejo Esperanza, la SeNAF se sostiene con trabajadores precarizados, con todo lo que eso implica. Entonces son como un conjunto de cosas que hace que funcione mal, que no se pueda asistir a los jóvenes. Los guardias que se llaman personal de asistencia y seguridad, que están para eso para asistir los jóvenes en las demandas, en las necesidades diarias, pero a la vez como guardias de seguridad, para los jóvenes y para quienes trabajamos ahí, figuran en la administración pública como trabajadores administrativos, por lo tanto no están cubiertos, no es reconocido como el trabajo que hacen, y además hay poco personal. Ha habido traslados compulsivos, han renunciado personas, se han ido a otras áreas, y nunca nunca toman nueva gente. Nosotros estamos trabajando con la misma cantidad de personal que en la pandemiaañadió la delegada sindical.

Sin comunicación

Parece que nadie escucha a los chicos ni a los trabajadores. Los planteos de los trabajadores no son escuchados. El canal comunicativo está roto. O sea se toman decisiones desde el Ministerio de Justicia, desde la SeNAF, desconociendo cual es la verdadera realidad que se vive al interior de cada una de las dependencias de SeNAF. Pero a su vez con trabajadores precarizados que ganan dos pesos, que están con inestabilidad laboral, sin seguro, sin ART, lo que genera también un malestar” exclamó Silberman, que además planteó la posición de los trabajadores de la SeNAF: Nosotros lo que queremos es una mesa de diálogo, sentarnos a que nos escuchen cuales son las problemáticas, y que es lo que vemos los trabajadores del Complejo Esperanza y de toda la SeNAF.

Precarización laboral

El 95% de los trabajadores de la SeNAF son monotributistas cuenta la entrevistada, para quien “es espantoso el clima laboral que genera” la situación de precarización laboral. Concluyendo el diálogo en Panorama, la entrevistada reflexiona al respecto y manifiesta su posición sobre esta terrible problemática: “Yo también lo que vengo planteando, -¿por qué hay violencias?- me preguntan muchos medios, -¿por qué hay violencias en los jóvenes?-, criminalizando también a los jóvenes. Y la verdad que hay falta de inversión, o de pensar políticas públicas previas. No debería existir un espacio para niños presos, no debería existir niños delincuentes. Entonces faltan políticas públicas, que contengan a las infancias, a las juventudes y a las familias para que no tengan que llegar al Complejo Esperanza. Y si llegan implementar políticas de contención ahí, que sean humanas y después políticas para una vez que egresan, darles alternativas para que estén incluidos de manera positiva en la sociedad”.