
Entrevista al legislador por el departamento Punilla, profesor Walter Gispert, por el periodista Juan Yacobs de Radio Panamericana FM 103.7 de Huerta Grande. Córdoba.
El legislador departamental por Punilla, Walter Gispert, se pronunció con dureza ante la crisis sanitaria que atraviesa el hospital municipal de La Falda, marcada por la suspensión de servicios esenciales como anestesia y obstetricia. En diálogo con Radio Panamericana, el funcionario señaló que esta situación “era previsible” y responsabilizó a la falta de planificación del gobierno provincial.
“Hace rato veníamos alertando sobre este tema. El hospital de La Falda atiende a toda la región norte de Punilla y parte de Cruz del Eje. No puede ser sostenido solo por los ciudadanos de La Falda”, enfatizó Gispert.
La situación se agravó por la caída del Fofindes, el fondo de coparticipación que sostiene en parte la salud pública municipal. Según explicó el legislador, este se redujo en un 40%, generando un “desfasaje económico” insostenible para el municipio.
“El intendente Javier Dieminger ha hecho gestiones ante la provincia, incluso enviando una carta firmada junto a otros intendentes del centro de Punilla. Pero la respuesta no llega, y mientras tanto el sistema de salud se apaga”, lamentó Gispert.
Con una mirada crítica, el legislador no dudó en señalar la gravedad del recorte: “Se está afectando lo más delicado: los partos. Se perjudica directamente el nacimiento de futuras vidas en nuestra zona”, expresó, en alusión al cierre del servicio de obstetricia.
Además, hizo hincapié en que el problema no es exclusivo de la salud pública: “La salud privada también está en crisis. Las clínicas del norte del departamento están debilitadas. Es un sistema que no está dando respuestas.”
Gispert dejó en claro que, si bien no quiere interferir con las negociaciones municipales, se ha puesto “a total disposición” para gestionar ante la provincia. Al mismo tiempo, criticó la lógica con la que se están priorizando recursos: “El gobierno actúa cuando la llama ya está encendida. No hay planificación. Lo mismo pasa con la seguridad, que será el próximo conflicto que explote en Punilla.”
Para el legislador, el trasfondo es más profundo: “Hay una política de retiro del Estado de áreas fundamentales. Esto no solo es un ajuste económico, es una visión que pone en riesgo derechos conquistados.”
Mientras tanto, los vecinos del centro-norte del valle siguen esperando. “El intendente viene alertando sobre esto hace rato. Si no hay una respuesta inmediata, esto va a escalar. La provincia no puede seguir apagando incendios sin prevenirlos”, advirtió Gispert.