El fenómeno climatológico La Niña

Los fenómenos climatológicos El Niño y La Niña forman parte de la Oscilación del Sur, un fenómeno de características naturales identificado por la fluctuación de las temperaturas de la superficie del océano en la parte central y oriental del Pacífico tropical, modificado el clima no sólo en el área del Pacífico, sino en todos los puntos del planeta; y que se agrava aún más y de una manera salvaje con el calentamiento global. Más pase el tiempo y menos actuemos en cuidado del medio ambiente, estos fenómenos serán cada vez peores.

Estos fenómenos climatológicos, son eventos cíclicos caracterizados por la fluctuación de la temperatura superficial del océano en el Pacífico ecuatorial, capaces de alterar la temperatura global y causar efectos atmosféricos extremos en todo el planeta. En Córdoba, para estos meses en los que comenzamos el año, pronostican un descenso en la cantidad de lluvias, y por ende, posibles sequías.

En nuestra zona, las lluvias merman en cantidad con La Niña. Aunque en Punilla no haya sequías considerables por el momento, es una cuestión que los gobernantes deberían ver en el largo plazo si el fenómeno se acrecienta o no, y que riesgos para la población existen cuando el fenómeno es extremo. La cuestión del acceso al agua es la madre de todas las luchas. El agua es vida.

“La Niña”

La Niña, evento frío o fase fría del ENSO, puede darse aproximadamente cada 2 a 7 años y aunque no tiene una periodicidad regular, pueden durar entre 12 a 18 meses. Durante el fenómeno de La Niña ocurre todo lo contrario. Los vientos alisios se fortalecen y las anomalías en la temperatura de las aguas superficiales del mar son esencialmente opuestas a las observadas durante El Niño, con aguas superficiales del mar más frías de lo normal en el Pacífico tropical oriental y más calientes sobre el Pacífico tropical occidental. En consecuencia, la atmósfera se enfría por el contacto con las frías aguas superficiales del océano, por ello, el agua no se evapora y el aire no se eleva, así que el nivel de lluvias y tormentas disminuye.

¿Cómo influye el cambio climático a este fenómeno?

Según los expertos en el tema, el cambio climático puede crear escenarios diferentes a los que estamos acostumbrados a ver en los diferentes episodios de El Niño y La Niña. El aumento de la temperatura global del planeta, tanto del aire como la de los océanos, podrían producir mayores impactos en futuros episodios. No sólo por el hecho de que el humano los haya generado, sino porque el escenario sobre el cual se desarrolla este fenómeno se ha alterado. El cambio climático está alterando los episodios de El Niño y La Niña, algo que se traducirá en mayores impactos en futuros episodios.

La información que  manejan los más autorizados organismos internacionales, ratifican que el fenómeno La Niña se mantendrá con intensidad hasta marzo, época en que comenzará un período “neutral” que, por lo que se puede vislumbrar, tiene pronóstico de ocurrencia hasta la Primavera de 2022. La mayor intensidad se verificaría en los meses de noviembre, diciembre y enero. Se atenuaría ligeramente en febrero y marzo.

¿Qué sucederá en Argentina?

La Oficina de Riesgo Agropecuario (ORA) del Ministerio de Agricultura y Ganadería de la Nación reafirmó sus reportes de los últimos meses titulando el que acaba de emitir con el título: “Se mantiene vigente aviso de La Niña”. Al respecto este organismo estatal mencionó que a mediados de noviembre, “las temperaturas de la superficie del mar (TSM) se mantienen muy por debajo de lo normal (-0,8 ° C) en el Pacífico ecuatorial centro-oriental. La evolución de las variables oceánicas y atmosféricas son consistentes con las condiciones de La Niña (…) Una gran mayoría de los modelos predicen que las TSM se enfriarán más o permanecerán por debajo de lo normal durante el verano 2022 y luego regresarán a niveles neutrales durante el otoño”.