
La capital del hambre
Todos sabemos que el poder económico-financiero y político de la República Argentina se concentra en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Ricardo Alfonsin, en la década del ochenta, intento trasladar la Capital a Viedma, en Rio Negro. Esa idea no prosperó. Esta concentración de todo tipo de capitales (sobre todo económico) lleva a que por ende en la Ciudad Autónoma sean palpable fácticamente los extremos de la riqueza y la pobreza. En este 2022 la situación social es tensa. Acampes, movilizaciones, son cotidianas en la Ciudad gobernada por el PRO.
Crisis social
La situación económica a nivel nacional se encuentra en un punto critico. Desde los medios hegemónicos no se habla mucho del tema. Que sí hay inflación, eso no hace falta leer un periódico o ver la televisión, solo con ir a la despensa nos damos cuenta. Marcos nos cuenta como se está viviendo la realidad en la capital del país, y agregó que ya a fines de Marzo “hubo un corte de tres días, dos noches, la gente esta saliendo a las calles. La gente que está yendo es gente que está caída del mundo, va ahí con una desesperación enorme. Por lo tanto esto se va a ir incrementando, la situación se va a poner mucho mas dura en invierno (…) La gente ha acampado tres días porque no tiene para comer”.
«En Callao y Corrientes, pleno corazón de la Capital veo un cartel que dice medialunas mil pesos, media docena de medialunas 530 pesos, el kilo de pan esta cerca de 400 pesos en algunos lugares. Ya con esos valores que tiene la harina y los commodities, la carne que también lo es, hasta parece barata a lo que vale una docena de medialunas».
Callejón sin salida
La solución de los grandes problemas que acarreamos en este país desde hace tiempo esta en la macro-economía. La micro-economía resuelve los problemas cotidianos, no los de fondo, ni los de forma. Acerca de esto, nuestro columnista dijo: “Hay que fortalecer los sectores de la economía popular(...)Tiene que haber un cambio en la estructuración de la economía. Si no se resuelve de la macro es estar discutiendo sobre cuestiones que no se van a resolver ni a corto ni mediano plazo. Estamos en un callejón sin salida”.
La deuda es con el pueblo
El Fondo Monetario Internacional ya está instalado en el país con sus operadores tanto propio como los obsecuentes locales. Se había ido y regresó con Mauricio Macri. A Martín Guzmán y Alberto Fernández parece no quedarles otra opción que el acuerdo. Y así pateamos por generaciones una cuestión que influye en nuestra soberanía nacional. Sierras lo explica así: “La deuda sigue siendo ilegítima y bajo parámetros de corrupción. No en cuanto a retornos económicos sino en corrupción en violar los propios estatutos del fondo. Yo creo que eso tranquilamente puede llegar a los tribunales internacionales por mas que el estado haya reconocido la deuda, es una deuda ilegitima, una deuda odiosa(…) La deuda es con el pueblo no con el fondo”.
Camino al paredón
El dilema de pagarle al Fondo, y el tabú de no pagarla. ¿Es legal la deuda?Esta bien que no pagarle al Fondo traería un impacto en la estructura económica. Restringiría casi por completo el acceso a crédito internacionales. No podríamos pedir y no nos darían crédito en organismos internacionales, sea el FMI, el Banco Mundial, el Banco Interamericano de Desarrollo o cualquier otro. El columnista sobre esto, diò su mirada: “La deuda es de U$D 45.000.000.000 si nosotros logramos ingresar o repatriar 20 mil millones de dólares que es lo que se estima estamos hablando que ingresaría al país la mitad de la deuda, la mitad de lo que se fugaron(…) Macri pidió un préstamo de 45 mil millones. Nosotros no tenemos ese dinero (…) Reestructurar la deuda es extender la deuda, ver como hago para pagar. Aparte de hacer eso estamos pidiendo dinero prestado para pagar deuda. Nos endeudamos para pagar deuda. Lo que hicimos es eso. No otra cosa (…) Patear la deuda para adelante es lo que se hace, esta es una deuda odiosa como dicen (…) Tenemos que pensar esa deuda. Llevarla a los tribunales internacionales. Pero hacer eso es ponerme en un lugar de enfrentamiento contra el poder económico, que es internacional. No se quiso hacer eso y acá estamos. Camino al paredón”.
Trazar el futuro
En esta encrucijada con el FMI, Argentina luego de resolver esta cuestión debería encarar un programa serio a futuro y replantearse cuales son sus verdaderos socios comerciales y que en realidad sirve al desarrollo soberano de nuestro país. En la actualidad “nuestro socio comercial en la región es Brasil y nuestro principal comprador de materias primas es China entre otros” concluye Sierras.