
En Panorama le realizamos una entrevista a Germán Parula, integrante de la Unión de Asambleas y Comunidades del Uruguay por la situación de sequía que azotó de manera crítica hasta hace poco y durante un largo tiempo a gran parte del territorio uruguayo.
Sequía histórica en Uruguay
“No es sequía, es saqueo, esa es nuestra consigna. Porque si bien hay escasez de agua en el sur del Uruguay sobre todo, que es donde se alimenta la cuenca del Río Santa Lucía, el río del cuál se extrae el agua para potabilizar para más de la mitad de la población del Uruguay, toda la población del área metropolitana de Montevideo y cercanías.Hay un problema de sequía es cierto, pero el problema de sequía se ha visto agravado por distintas actividades agroindustriales” inicia relatando Parula sobre la peor crisis hídrica de los últimos 70 años en Uruguay.
Esta grave situación hídrica que afectó al sur del Uruguay hasta hace unas semanas atrás, desató la polémica sobre los efectos negativos de las distintas actividades económicas que se practican en el territorio, donde la industria de la pasta de celulosa marcha a la cabeza. El tipo de actividad que realiza este sector industrial agrava la situación de la escasez del agua. Al respecto el entrevistado menciona: “La poca agua que hay después de tres años de sequía se ve afectada también por la enorme cantidad de monocultivos de eucaliptus que invaden las nacientes del Río Santa Lucía y de otros ríos. Tenemos prácticamente el 10% de la superficie del país plantada con eucaliptus para proveer a las tres gigantescas fábricas de pastas de celulosa que se instalaron en Uruguay en los últimos años”.
El eucaliptus se caracteriza por absorber mucha agua de la tierra. Sobre el proceso del crecimiento del eucaliptus, el activista ambiental nos explica: “En ocho años ya tienen el eucaliptus adulto y lo pueden procesar. Y el eucaliptus para crecer tan rápido necesita cantidades industriales de agua a diario. Hay libros que hablan de treinta litros por día, por cada eucaliptus. Y hay libros que hablan de hasta 70 litros, dependiendo también el grado de madurez que tenga el árbol. Pero estamos hablando que eso hay que multiplicarlo digamos por mil en cada hectárea plantada, y por un millón y pico de hectáreas que han sido plantadas hasta el momento. Nos están secando el territorio con los eucaliptus”.
En el área metropolitana de Montevideo más de la mitad de la población no tuvo acceso al agua potable. Todo esto que sucede pone en duda la calidad del agua. Para los uruguayos afectados fueron casi cinco meses en que no podían beber el agua de la canilla “ni siquiera hervida”. La principal fuente de agua dulce para Montevideo y sus alrededores es el embalse de Paso Severino, a unos 85 km al norte de la capital. La población de Montevideo consume un promedio de 550.000 m3 diarios del vil elemento.
En los momentos más críticos de la sequía se tomó agua del Río de La Plata para abastecer a la población. En Montevideo y Canelones, un bidón de 6,25 litros de agua se consigue por 130 pesos (unos 3,4 dólares). A raíz de la crisis producto de la escasez, el consumo de agua envasada se disparó. Las ventas crecieron un 224% en mayo con respecto al mismo mes del año anterior. El mayor incremento se dio en las botellas de agua sin gas (467%) y en los bidones (217%). Todo el mundo ha estado comprando bidones de agua.También hay gente que no puede pagar, y “está tomando agua del grifo y se está envenenando” porque es “agua que no puede ser consumida”, menciona Parula.
“No ha habido previsión de parte del Estado, la administración actual y la anterior. En esto hay que ser claro, esto no es un problema solo de la administración actual, por más que hoy los responsables directos son los gobernantes actuales. Pero estos problemas tienen larga data y arrancaron con las administraciones anteriores. Si vamos al caso, la Ley Forestal que se creó como la mayoría de las leyes para beneficiar a los inversores, a los poderosos, es de 1987, ahí inicia la historia de las fábricas de pasta de celulosa, con la Ley Forestal en 1987” agrega. Las pasteras se comenzaron a instalar dentro del territorio en el 2005.
Este problema lo causó “el sistema político” en su conjunto. La problemática del agua dicen los especialistas continuará durante al menos 20 años más. Ya finalizando la conversación en Panorama, el entrevistado manifestó: “La respuesta de las autoridades era, bueno, tenemos que esperar que llueva. Es como una gran burla. Y la OSE (Obras Sanitarias del Estado), la empresa encargada de potabilizar y distribuir el agua ni siquiera ha generado un alivio en la factura que pagamos mensualmente los uruguayos por esa agua que es intomable. Ni siquiera eso, estamos pagando mensualmente, acá en mi casa, estamos pagando 25 dólares mensuales por un agua que no podemos beber”.